Ganoderma Lucidum, el hongo adaptógeno
Un adaptógeno debe provocar tan sólo cambios mínimos en las funciones fisiológicas del cuerpo, aumentar la resistencia del cuerpo a las influencias adversas, no por acciones específicas sino por un amplio abanico de acciones físicas, químicas y bioquímicas y debe tener un efecto normalizador general, mejorando todo tipo de condiciones y sin empeorar ninguna. Es muy importante tener en cuenta que los adaptógenos no son un dopaje natural, sino promotores de salud y que nuestro cuerpo requerirá sus horas de descanso, una buena alimentación, etc., para recuperarse adecuadamente.
Acciones generales de un adaptógeno:
1) Apoyan la función adrenal, mejorando los efectos adversos provocados por el estrés.
2) Permiten que las células del cuerpo tenga acceso a mayor energía.
3) Ayudan a las células a eliminar las toxinas producidas en los procesos metabólicos.
4) Efecto anabólico (de construcción), por eso los utilizan los culturistas.
5) Ayudan al cuerpo a utilizar el oxígeno de forma más eficaz.
6) Potencian y aceleran la regulación apropiada de los ritmos biológicos.
Ejemplos de adaptógenos:
1) Ganoderma Lucidum (también conocido como Reishi o Lingzhi)
2) Ginseng
3) Rodiola
4) Morinda citrifolia (conocido como Noni)
5) Withania somnífera (conocida como Ashwagandha)
6) Schisandro chinensis (llamada Esquisandra)
7) Regaliz
8) Astragalus membranaceus (planta llamada comúnmente como Astrágalo)
9) Uncaria tomentosa (Uña del gato)
10) Silybum marianum (Cardo lechoso)
Diferencias entre un adaptógeno y un medicamento sintético:
Dado que las plantas superiores conocidas como adaptógenos son la punta de lanza del tratamiento con Medicina Sistémica, es importante el conocimiento de sus características para su correcta utilización.
En primer lugar, el tratamiento con adaptógenos no está divorciado de los tratamientos sintéticos ya que ambos juegan un papel de primordial importancia y ambos en conjunto son esenciales para el tratamiento.
1- La primera diferencia que existe entre un fármaco sintético y un adaptógeno es que el fármaco es monodireccional, mientras que el adaptógeno es bidireccional. El medicamento sintético está diseñado para causar un efecto en un determinado sistema, por ejemplo: los medicamentos antihipertensivos bajan la tensión arterial y se corre el riesgo de hipotensión, así mismo los medicamentos hipoglicemiantes bajan la glicemia y se corre el riesgo de hipoglicemia.
2- La segunda diferencia es que el cuerpo humano al evolucionar como parte de la naturaleza, adquirió la capacidad de reconocer, metabolizar y excretar sustancias naturales. Esto no ocurre con las moléculas sintéticas nuevas con químicos fabricadas por el hombre, ya que el organismo no las reconoce y son potencialmente tóxicas, provocando efectos secundarios indeseables y en muchas ocasiones cuestionables e inaceptables.
3- La tercera diferencia es que el adaptógeno actúa para estimular uno a varios de los tres ejes de la salud, mientras que el medicamento sintético actúa sobre uno (generalmente la organización como es el caso de los analgésicos y antiinflamatorios, pero suprimen los lados restantes lo que se manifiesta como efectos secundarios.
4- La cuarta diferencia es que el adaptógeno está dirigido a la causa mientras que los fármacos convencionales están diseñados para tratar las consecuencias (signos y síntomas de la enfermedad).
5- La quinta diferencia es que el medicamento sintético por su rápida acción es más útil en una emergencia. Por ejemplo en casos de dolor agudo está absolutamente indicado el uso de analgésicos de acción rápida, como por ejemplo la uña de gato, uña del diablo y Reishi (Ganoderma lucidum).
Muy importante:
Sabemos también que no todo lo natural es sano: existen plantas tóxicas y hasta venenosas pero este no es el caso de los adaptógenos. Sabemos igualmente que pudieran existir interacciones entre plantas y sintéticos, tal es el caso del café y los IMAO, el Ginkgo biloba y los anticoagulantes, sin embargo, también sabemos que podemos potenciar los efectos antitumorales de los agentes quimioterapeúticos y disminuir los efectos secundarios tan severos que estos tratamientos sintéticos pueden producir.
Es importante destacar que no es lo mismo tratar con principios activos de las plantas por separado que con la totalidad de la planta. Esta última acción es mucho más efectiva. Nos permitimos concluir que al tener un problema de salud y considerar un tratamiento integral, el paciente debe acudir a profesionales con conocimientos profundos de herbaria y de fármacos sintéticos. El conocimiento trae consigo responsabilidad y control.